Una vieja evita un atraco
En realidad no creo que el hombre cesara en su empeño de atracar al comerciante por la intensidad del ataque de la abuela. Pero al menos ayudó a poner un poco más nervioso al atracador que ante la resistencia también del dependiente, acabó saliendo por patas sin su botín.
Atentos a la señora porque no tiene desperdicio, la mujer de 75 años y de identidad no revelada, no duda un instante en hacer frente al atracador con lo primero que pilla, la pistola del lector de código de barras. La verdad es que resulta gracioso, pero hay que reconocerle mucho valor, más aún teniendo en cuenta su edad.