Accidente contra una tienda
Desde luego los hay muy malos al volante, tan malos que deberían retirarle el permiso de conducir de inmediato por peligro público, es el caso de este hombre que dejó apretado el pedal del acelerador y se empotró literalmente contra una tienda.
De milagro no se llevó por delante a dos clientes, destrozando el escaparate y quedando estacionado en el centro de la tienda.